Rusia lanzó este jueves un misil balístico intercontinental durante un ataque contra Ucrania, en lo que sería el primer uso conocido de este tipo de arma en la guerra, según la Fuerza Aérea de Kiev.
El misil, que tiene capacidad nuclear y un alcance de miles de kilómetros, fue disparado después de que Ucrania lanzara misiles estadounidenses y británicos contra objetivos dentro de Rusia, a pesar de las advertencias de Moscú sobre una posible escalada en el conflicto.
Los expertos en seguridad señalaron que, de confirmarse, este sería el primer uso militar de un misil balístico intercontinental (ICBM) en el conflicto. Estos misiles, diseñados para transportar cabezas nucleares, son una parte importante de la disuasión nuclear rusa.
La Fuerza Aérea ucraniana no especificó si el misil contenía ojivas nucleares, pero se informó que el ataque tuvo como objetivo infraestructuras críticas en la ciudad de Dnipró, en el centro-este de Ucrania, causando daños en una empresa industrial y provocando incendios.
Rusia también disparó otros misiles, como un misil hipersónico Kinzhal y varios misiles de crucero Kh-101, de los cuales varios fueron derribados por las defensas ucranianas. Según la Fuerza Aérea ucraniana, el misil balístico intercontinental fue lanzado desde la región de Astracán, situada a más de 700 kilómetros de Dnipró. Este ataque ha aumentado las tensiones entre ambos países, especialmente en el contexto del milésimo día de guerra.
Los analistas de seguridad cuestionaron si Estados Unidos había sido informado con antelación sobre el lanzamiento del misil, dado que la notificación previa sobre estos ataques es fundamental para evitar una respuesta militar. Algunos expertos señalaron que, si se confirma el uso del misil, sería un hecho sin precedentes en la historia reciente del conflicto, ya que las armas de este tipo son generalmente utilizadas para disuasión estratégica y no en conflictos convencionales.
Las tensiones siguen en aumento, y mientras tanto, las relaciones entre Ucrania y sus aliados occidentales continúan complicándose, con Rusia advirtiendo que el uso de armas occidentales en territorio ruso podría significar una escalada aún mayor en la guerra.
Con información de El Economista
bvp
