Arqueólogos han descubierto una gran ciudad maya, llamada Valeriana, oculta bajo la selva en el estado de Campeche, México, mediante el uso de tecnología Lidar, un sistema láser que permite mapear estructuras enterradas bajo la vegetación. Este sitio, ubicado cerca de Xpujil y a 15 minutos de una carretera principal, muestra una densa concentración de edificaciones comparable a la de Calakmul, el mayor asentamiento maya de Mesoamérica. La ciudad, que se extiende sobre 16.6 kilómetros cuadrados, se cree que tuvo su apogeo entre el 750 y el 850 d. C., albergando entre 30,000 y 50,000 habitantes.
El hallazgo se produjo cuando el investigador Luke Auld-Thomas, de la Universidad de Tulane, exploraba datos de un estudio láser realizado para monitoreo ambiental. Al procesar los datos con técnicas arqueológicas, Auld-Thomas identificó lo que parecía ser una antigua ciudad con estructuras significativas como pirámides, plazas, campos de pelota y caminos que conectaban dos centros urbanos a 2 kilómetros de distancia.
Entre los restos encontrados se destacan templos piramidales y un reservorio que muestra cómo los mayas aprovechaban los recursos naturales para sustentar a su población. El descubrimiento también revela cómo los mayas habitaban en ciudades densamente pobladas y organizadas, y no en pequeñas aldeas aisladas, como señaló la profesora Elizabeth Graham del University College de Londres. La densidad poblacional de Valeriana sugiere que el cambio climático y la falta de flexibilidad para adaptarse a la sequía podrían haber influido en su abandono, un fenómeno que afectó a varias ciudades mayas antes del colapso de la civilización en el año 800 d. C.
La investigación destaca que la tecnología Lidar ha revolucionado la arqueología en regiones selváticas, facilitando la detección de civilizaciones perdidas y aportando nueva información sobre el desarrollo y la organización de los antiguos asentamientos mayas.
Con información de BBC Mundo.
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