La Coparmex y la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM) se unieron para expresar su rechazo al proyecto de reforma a la Ley del Infonavit. Ambas organizaciones advierten que, lejos de fortalecer al organismo, la reforma pone en riesgo unos 800,000 millones de pesos que están bajo su administración.
Juan José Sierra Álvarez, presidente de Coparmex, y Rodolfo González Guzmán, líder de la CROM, se opusieron a la propuesta de utilizar esos recursos para financiar nuevos desarrollos habitacionales, dado que el dinero proviene de las cuotas obrero-patronales.
De los 800,000 millones de pesos, aproximadamente 350,000 millones se destinarían a la construcción de casas y departamentos. Además, Sierra lamentó que en 53 años de existencia del Infonavit, el gobierno federal no haya aportado recursos.
Ambos líderes empresariales también cuestionaron que la reforma elimina el principio tripartito que rige al Infonavit, ya que otorgaría al presidente de la República el derecho de nombrar al director general del organismo, quien tendría control sobre los dos órganos de gobierno más importantes.
El proyecto de reforma ya fue aprobado en la Cámara de Diputados y espera la aprobación del Senado para su promulgación. Ante esto, sugirieron que la SHCP y la CNBV supervisen con rigor al Infonavit si la reforma es aprobada.
La iniciativa busca que el Infonavit utilice sus fondos para crear una empresa constructora que desarrolle viviendas, pero las organizaciones empresariales y sindicales consideran que este enfoque atenta contra los recursos de los trabajadores.
Con información de Fortuna
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