La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, presentó el Plan Nacional Hídrico, cuyo propósito principal es reconocer el agua como un derecho humano y un bien de la nación. En la conferencia matutina, destacó que este plan busca romper con la visión neoliberal, continuando y ampliando los esfuerzos iniciados en la administración de Andrés Manuel López Obrador.
«El agua deja de verse como una mercancía y se reconoce como un derecho», afirmó Sheinbaum, enfatizando la importancia de recuperar este recurso como un elemento clave para la justicia social y el desarrollo sostenible del país.
El plan se estructura en cuatro ejes fundamentales:
- Política hídrica y soberanía nacional.
- Justicia y acceso al agua.
- Mitigación del impacto ambiental y adaptación al cambio climático.
- Gestión integral y transparente.
Entre las acciones prioritarias destacan la ordenación de concesiones, fomentando la devolución voluntaria de volúmenes de agua no utilizados, y la tecnificación del riego agrícola para aumentar la productividad del campo y garantizar una mayor disponibilidad de agua. También se implementará un Plan Maestro, en colaboración con gobiernos estatales y municipales, para trabajar en infraestructura de agua potable.
Además, se contemplan proyectos estratégicos para canalizar inversiones hacia las regiones con mayor necesidad y acciones de saneamiento que restauren cuerpos de agua clave, como los ríos Lerma-Santiago, Atoyac y Tula.
El lunes 25 de noviembre, iniciarán formalmente las acciones del plan con la firma del Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y la Sustentabilidad, un compromiso que involucra a diversos sectores del país.
Con información de Imagen Radio
bvp